Bratislava

Plaza principal (aquí sale el free walking tour)

Salimos muy temprano para poner rumbo a la capital de Eslovaquia, lo primero que hicimos fue hospedarnos en el Hostel Blues (12 EU por persona en habitación cuádruple), el cual se encuentra a unos minutos caminando del centro de la ciudad y el personal es muy amable, para estacionar el carro frente al hostal nos proporcionaron unos tickets que valen 0.6 euros la hora hasta las 8 de la noche.

Iglesia Azul

De ahí partimos al free walking tour que inicia a las 11 de la mañana, estos tours realmente los recomiendo pues hablan de la historia, costumbres y cultura de la ciudad desde el punto de vista de un local, nuestra guía fue muy amena y divertida (y guapa!) al finalizar puedes dejar una propina si así lo crees conveniente. El tour parte frente al teatro principal y recorres toda la ciudad vieja hasta llegar a un parque frente al Danubio. Algo que agradecí mucho fue la clase de historia que nos dio la guía, desde el imperio Austro-Húngaro y el comunismo, hasta el capitalismo y la entrada a la Unión Europea.

Castillo de Bratislava

Los puntos de interés que visitamos fueron:

• La casa presidencial
• Iglesia de los Trinitarios
• Puerta de San Miguel
• Castillo de Bratislava (Museo Nacional Eslovaco)
• Catedral de San Martín
• Puente de Maximiliano
• Palacio del Primado
• El teatro nacional Eslovaco
• La Iglesia Azul
• Y el memorial de guerra Slavin

Slavin

Bratislava es una ciudad que, aunque tiene la mayor densidad de población de Europa central, es fácilmente recorrible, el tour gratis abarca gran parte de la ciudad, al despedirnos de nuestra guía nos dirigimos hacia el Danubio para descansar y contemplar el paisaje, para continuar rumbo al Castillo, el cual es una construcción muy bella por fuera, por dentro no me impresionó mucho, eso si, la vista es genial!

El OVNI a orillas del Danubio

Lo que queríamos era ver el Memorial de Slavin al atarder y alrededor de las 3 pm partimos hacia allá. La subida de las calles empinadas fue todo un reto! Pero al llegar al memorial valió la pena por completo, la vista hacia el castillo y el atardecer es hermosa, además de todas las tumbas de soldados rusos caídos para el rescate de la ciudad durante la segunda guerra mundial.

Ciudad Vieja

Bajamos de regreso a la ciudad vieja para probar comida típica, cerveza típica y el muy típico pero no tan agradable Slivovica un licor de ciruela muy fuerte y de varios sabores. Comimos en el Bratislaska Restauracia una sopa de ajo demasiado fuerte servida en un pan caliente (cesnacka) que no me gustó, el Bryndzové halusky que es papa (que parece pasta) con queso de cabra y tocino muy rica! Así como varias cervezas tradicionales que tampoco me gustaron, demasiado amargas. Los lugares visitados fueron el Bratislasky Mestiansky Pivovar la cervecería y el U Zlateho Bazanta pub donde probamos el Slivovica.

Cesnacka

Después de la comida y la mucha bebida nos retiramos a descansar pues el siguiente día sería muy largo.